Las fiestas no han tenido el colorido y la alegría de otros años. En
este 2012 hay mucha cordura y cautela en los gastos, algo que tiene que
ver con la reforma tributaria que impuso el gobierno.
La celebración de las fiestas de navidad es siempre una oportunidad
para la reflexión. Son muchos los grupos y personas que esperan esta
época de año para plantearse transformaciones o cambios en sus vidas, a
propósito de la idea que se conmemora, vinculada con la vida de Jesús.
Otras personas pierden un poco los estribos y bailan y beben en
abundancia, se emborrachan en una confusión sobre el sentido de la
navidad. Hay que respetar a quienes lo hacen, pero siempre es necesario
advertir que la ocasión no es la más adecuada.
Otros se exceden en los gastos, y dedican todo lo que reciben como
doble sueldo y bonificación en gastos que podrían ser onerosos. Es una
costumbre. Incluso hay gente que se endeuda para cambiar carro, decorar
la casa, hacer viajes.
Este año las navidades han estado revestidas en la República
Dominicana de una mayor cautela. Ha habido menos fiestas y menos
derroche, y por supuesto todo el mundo está con la expectativa de lo que
nos deparará el 2013, con una reforma tributaria fuerte, que tendrá
gran impacto en la economía popular.
Eso no quita que tengamos una celebración de nochebuena en familia, y
que celebremos en la medida de las posibilidades, sin excesos, en el
mejor ambiente que podamos crear. De parte del equipo de Parrander@s Dominicanos los mejores deseos para ti y tu familia en estas fechas.
FELIZ NAVIDAD!!
Fuente: Acento.com.do
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